Páginas

martes, 13 de agosto de 2013

Patatita

Estás empezando a no dejar de parlotear, M., y te juro que se me pasan los minutos embobada tratando de entender a qué te refieres cuando dices patatita. Si ya encima has encontrado un punto de apoyo y te puedes poner de pie, la patatita se repite hasta tres veces: patatitapatatitapatatita con ojos brillantes y sonrisa radiante que muestras orgulloso y triunfal por haberte podido levantar, al fin puedes hacerlo solo después de meses de depender de que el papá o la mamá te ayudaran a subir ese culito gordo el palmo escaso que te lo separa del suelo.
Tu parloteo me acompaña desde por la mañana, no callas más que cuando te llevas el cachito de pan a la boca y lo saboreas despacio, cogiendo miguitas con los dedos y estudiándolas lentamente antes de tirarlas al suelo. Tienes una voz que al principio es un poco ronca y según vuela la palabra fuera de tu boca se va suavizando hasta ser un grito agudo y radiante en la última letra, justo antes de repetir patatita, o cambiarlo por gugu o por pacum pacum o por piticum, tus otros palabros mágicos que de momento tan sólo tienen significado para ti.
Pasan los días rápidos. Muy rápidos.
Me has roto el Bloc Mayus y te partías de risa con la tecla en la mano, te regañé un poquillo y me mirabas con cara de pillo, con la nariz brillante de sudor y los morritos preparados para decirme papa. No hijo, yo soy mamáMaaaaamáaa. Mammma, me dices por fin. No sabes lo que es, pero me da igual. A veces me imagino qué palabras inventarías si fuéramos británicos, cómo entonarías si en lugar de mamá yo dijera I´m mum. Pero nuestra casa es esta, y tú estás creciendo oyéndome llamarte cuchifrito, cuscurro, gordito, corazón de melocotón. 
Te grabo una y otra vez y cuando te das cuenta de que tengo el móvil en alto y que no digo ni pío y que no te contesto, te callas. Te pido bajito que me digas algo, y como resignado, medio riéndote, me regalas lo que quiero atesorar con tanto empeño: patatita.
Tu voz, hijo,  ha sido de lo más bonito que me ha traído el verano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario